De
niño, solía jugar en el galponcito que tenía mi viejo en el fondo de nuestra
casa.
Normalmente
imitaba a Don Miguel haciendo las reparaciones hogareñas. Había en ese lugar,
un mueble al que llamábamos “la
pirámide”, que era justamente eso, pero
trunca y en la parte superior mi papá le había instalado un grueso hierro para
golpear y ahí yo también golpeaba y
“arreglaba” mis juguetes.-
Curiosamente
a esa edad ignoraba, que “la pirámide” era nada más y nada menos en la que se
tallaron los bustos y monumentos más importantes del país.
Ese
mueble fue la pirámide base del torneto del Maestro Luis Perlotti.-
Don
Luis, nació en buenos Aires a fines del siglo XIX, vivió durante muchos años en
el Barrio de caballito a escasas dos cuadras de la casa de mi abuela materna y
de ahí su amistad con mi tío y padrino, quien era el encargado del traslado de
casi todas sus obras.-
Esa
relación sirvió para que le regalara, después de algún viaje aquella vieja pirámide,
a quien yo sólo le di el valor de un juguete y mi papá de simple mueble de
trabajo.
Luis
Perlotti es uno de los más grandes
escultores argentinos y entre sus obras podemos mencionar al monumento de
Alfonsina Storni de Mar del Plata, el monumento de Parque los Andes en el
barrio de Chacarita, que representa a varias etnias originarias.-
Don
Luis, fue un estudioso indigenista. Recorrió durante muchos años distintos
países de América para interesarse por las características de los distintos
pueblos originarios.
No
sólo grandes monumentos lo distinguen, fue el autor de muchos bustos de nuestros
próceres, entre ellos Sarmiento (1938), que es uno de los más reproducidos y puede verse en todos los
rincones del país.-
Luis Perlotti y Carapachay:
Nuestra
querida placita tuvo su primer busto de
Sarmiento por iniciativa de la Asociación
Amigos de Carapachay, pero duró poco tiempo instalado. En una
noche calurosa de marzo de 1960, luego de las 10 escuchamos un
fuerte estruendo…el busto del Maestro había volado por los aires.-
Ante
esta situación el 11 de setiembre de 1960 por iniciativa de la Sociedad de Fomento
Drysdale, se descubrió un nuevo busto de Sarmiento, precisamente obra del
maestro Luis Perlotti, quien participó del evento.-
No
puedo olvidar ese día, por lo emocionante de la ceremonia, que describe con
mucha pasión don Arturo E. García, en la Historia
de Carapachay.-
Un
dato de color, en la foto que acompaño en el ángulo inferior izquierdo, aparezco, medio borrado y de colado,
jajajajaja.-
Como
homenaje a la obra del gran escultor argentino, nuestro vecino, el Pintor
Enrique Rodríguez, donó una cabeza de
aborigen realizada en 1935 por el maestro Perlotti. La cabeza no tiene nombre,
pero es muy similar a la del Indio Andresito.-
Espero
les haya gustado esta nueva entrega, pronto nos encontramos con otra historia.-
* Pueden verse trabajos similares en la página Web del Museo de las Esculturas de la Ciudad de Buenos Aires